solo kiero saber

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Resumen

Sakanusoyin es un joven perteneciente a la cultura Ona, habitaba tierra del fuego, él  es la esperanza de su pueblo. Es un cazador  ágil, veloz y astuto, posee dones que lo convierten en el mejor cazador de Tierra del Fuego.

Él siente un gran respeto por los guanacos, de hecho no le gusta cazarlos, pero es obligado a hacerlo para satisfacer el hambre de su pueblo.

Como es el mejor cazador del lugar, el padre Salilsusoyin le pide que le enseñe todas sus virtudes, él accede felizmente a su petición. Juntos inician un camino de caza, en dónde Sakasusoyin le enseña todo lo que sabe. Salilsusoyin en un comienzo sentía una profunda envidia por este hábil cazador, pero con el tiempo este sentimiento cambio, ambos se volvieron hermanos inseparables.

Un día ambos salen de caza, en búsqueda de guanacos, animal que comenzó a escasear por falta de criterio de los cazadores. Sólo Sakanusoyin encontró una hembra pequeña, a la cual cobijo en un escondite, su amigo al ver al animal se abalanzó sobre él para eliminarlo, esto produjo un enfrentamiento entre ambos amigos, una lucha que terminó cuando ambos se cansaron, en ese instante Sakanusoyin le pide a su amigo que reflexione y que lo escuche, pero su amigo no entendía su posición, lo consideraba un traidor por no llevar al animal para alimentar al pueblo. Entonces Sakanusoyin le propone soltar al guanaco y el que lo atrapara primero sería quien lo utilizaría, así fue el animal se soltó, y ambos salieron a su captura. En el camino de la captura, Salilsusoyin cayó exhausto, mientras que su amigo continúo el camino.

Sakanusoyin, tras un largo recorrido, finalmente logra capturar al pequeño guanaco, él se lo lleva consigo a su escondite. Una vez allí, Sakanusoyin, comienza a extrañar a su compañero, es por esta razón, que envía a unos zorros en su búsqueda, quienes velozmente llegan hasta el lugar donde se encontraba y lo orientan hacia el lugar donde estaba su amigo.

En el camino, Salilsusoyin, se encuentra con un guanaco al cual intenta cazar, el animal se arranca y llega al lugar en donde se encontraba el guanaco de Sakanusoyin. Cuando Salil, llega al lugar ve ambos animales, toma su arco y flecha y se prepara para disparar, esta situación es advertida por Sakanusoyin, quien, por medio de silbidos, hace que su amigo se percate de su presencia.

Sakanusoyin se acerca a su compañero y le explica que Temáukel, el ser superior, el dios de los habitantes de tierra del fuego, le había hablado y aconsejado, le ha dicho que el guanaco es sagrado y que su deber es enseñar a preservarlo, por lo mismo se quedaría con ambos animales, con el fin de que estos se procreen.

Sakanusoyin, saca de su bolsillo dos figuras de barro, y le indica a su amigo, que mañana ambas figuras, serian las crías de estos guanacos.

Así fue como ocurrió, al día siguiente ambas figuras eran dos pequeños guanacos, que estaban siendo amamantados por su madre.

Los jóvenes admirados por lo que sus ojos veían. Sakanusoyin mira a su amigo y le dice que deberá ir al pueblo y llevar un mensaje, el cual consistía en que él regresaría al pueblo cuando la familia de guanacos armara una gran manada, los cuales seguirán siendo cazados, pero con criterio, nunca más se cazara hasta extinguir la especie, ya que de ellos podemos obtener grandes beneficios.

Salilsusoyin comprende el mensaje de su compañero y comienza el viaje, sabiendo que su gente entendería el mensaje al igual que él , porque Sakanusoyin, le había hablado como un verdadero chamán, con sabiduría, la cual es respetada por el pueblo.

Datos del libro

Título: Sakanusoyin, cazador de tierra del fuego.

Autor: Víctor Carvajal.

Nacionalidad: Chileno.

Editorial: Alfaguara juvenil.

Edad de lectores: desde los 12 años, séptimo básico.

Valor comercial: 3.000 pesos.

Año última edición: 2005.

Esta novela obtuvo el Premio Consejo Nacional del Libro y la Lectura y el premio The White Ravens 2000.

Monólogo

El es mi hijo, se llama Sakanusoyin. Nosotros pertenecemos al pueblo ona, habitantes de tierra del fuego.

Como pueden ver, a través de esta foto, a él le gustan mucho los guanacos, desde muy pequeño, el se dedicaba a jugar y cuidar de ellos.

Su vida ha estado muy unida con este animal, cuando Sakanusoyin nació a mi lamenmente se me seco la leche, yo estaba desesperada porque no tenía con que alimentar a mi hijo y entonces acudí, a una guanaca, quien lo amamanto, gracias a este animal él pudo sobrevivir.

Sakanusoyin conoce esta historia, él me dice que se siente hijo de guanacos y que por sus venas corre la sangre de este animal.

Hoy mi hijo es un hábil cazador, es el mejor de todos, es veloz, ágil y astuto. Siempre llega con las mejores presas para alimentar a todo el pueblo. Pero hay algo muy lamen, a la gente del pueblo le gusta mucho la carne de guanaco y le exigen a mijo, a cazar guanacos contra su voluntad, él le debe dar muerte a este animal, comprenderán lo terrible que es esta situación para él.

Al llegar de su caza, entrega la presa capturada, y luego se esconde y llora, llora por largo tiempo, su vida se torno triste, en sus ojos lo expresa.

La felicidad  del  pueblo  por comer la carne de guanaco es la infelicidad de mi hijo.